Publicado en Crónica el lunes 7 de mayo
Instalado en la desmesura, El Bronco se beneficia de la polarización entre los candidatos punteros. Aquella disputa nos tiene tan abrumados que no reparamos, casi, en los dislates del gobernador con licencia.
La opinión publicada se burla de las grotescas insensateces de Jaime Rodríguez Calderón. Las ocurrencias de ese personaje parecen más propias de los caricaturistas que del análisis político. Pero ahí está, en el centro del escenario público, con la visibilidad que le dan las pasarelas de candidatos presidenciales, tres debates en cadena nacional y su nombre en las boletas el primero de julio.
Mientras nos reímos de él y lo menospreciamos de tan burdo y ridículo El Bronco sigue construyendo un perfil público que, en medio de la confusión de estas campañas especialmente revueltas, gana espacios en la sociedad. No competirá con el resto de los candidatos pero por confusión, hartazgo o mera ocurrencia de no pocos ciudadanos, recibirá cientos de miles de votos. Más allá de esta elección, Rodríguez Calderón habrá consolidado una fama pública nacional que le permitirá mantenerse como referencia de los intolerantes. Seguir leyendo «La nueva derecha en la boleta electoral»